“El mejor regalo que podemos dejarle a las nuevas generaciones es la educación”, es una frase muy utilizada, y podemos aplicarla a diferentes contextos. Uno de ellos es el Día de la niñez, que se celebra este domingo 6 de agosto. Es muy probable que si tienes hijos o niños en tu entorno cercano, hayan pedido un regalo. Y aprovechando esta clásica frase, en Üin queremos que, además de ese juguete que piensas regalar, le entregues a los más chicos de tu casa algunas nociones básicas sobre finanzas.

Sabemos que no es una tarea fácil y que muchas veces alejamos a los niños de estos temas para “protegerlos” de la vida adulta, pero en la actualidad es muy importante que desde temprana edad conozcan el valor del dinero y aprendan a administrarlo.

Esta semana queremos entregarte algunos consejos y recursos a los que puedes recurrir para comenzar a crear hábitos financieros saludables en los más pequeños de tu hogar. Así tendrán un futuro brillante y libre de estrés financiero.

¿Cómo enseñar a los más pequeños sobre finanzas?

Para muchas personas es difícil hablar con niños y niñas sobre dinero, sobre todo porque se tiene la idea de que los más pequeños no entienden el contexto en el que se maneja la plata. Para comenzar a crear una conversación en torno al dinero con los niños, hay que partir por lo más básico.

Y para eso recomendamos que antes de todo, les regales una alcancía a tus niños. Con este simple pero poderoso objeto, podrán ahorrar y conocer un poco más de cerca cómo se usa y cuanto vale el dinero.

Con ese primer paso dado, te invitamos a iniciar una conversación preguntando si tienen una idea de qué es y para qué sirve el dinero. Para un niño sin nociones previas, basta con decir que el dinero es un medio (monedas, billetes y en la actualidad tarjetas) que se utiliza como intercambio por cosas o servicios.

Para conocer su valor, hay que profundizar en cómo se obtiene el dinero. Aquí dependerá de ti darle una descripción detallada de que, por medio de un trabajo remunerado o por el intercambio mencionado anteriormente, se obtiene dinero.

Cuando tengan una idea base de qué es y para qué sirve el dinero (en cualquiera de sus formatos), es momento de darle valor práctico. Es decir, explicar que cierta cantidad de dinero se puede intercambiar por cierta cantidad de productos o servicios.

En este punto puede ser una buena técnica usar el dinero real que han podido ahorrar en sus alcancías e invitarles a que dispongan de él. En este ejercicio introduce un nuevo hábito: el de ordenarse. Enseñar desde temprana edad la importancia de un presupuesto y un registro será clave para que los más pequeños comprendan e interioricen que controlar lo que entra y lo que sale de sus bolsillos es la mejor herramienta para gozar de tranquilidad financiera.

Por último, explica cómo ahorrar. Ellos ya tendrán la experiencia de haber usado la plata que tenían en sus alcancías, por eso puedes usar un ejemplo simple y relacionarlo a una meta personal del niño o niña. Así, además de conocer la importancia del ahorro, comenzará a crear metas financieras a corto, mediano y largo plazo.

Nunca es demasiado temprano para construir un futuro financiero sólido. Desde temprana edad, es clave generar hábitos saludables que estén presentes a lo largo de nuestras vidas, y que nos permitan gozar de una buena salud financiera, libre de estrés.

Los hijos del equipo Üin cuidan sus finanzas desde pequeños: