Para conocer más a fondo los hábitos financieros de los miembros del equipo Üin, les pedimos que nos cuenten sus experiencias viviendo en comunidad. 

Cada caso es único a su modo. Natalia vive con su pareja, Catherine volvió a casa de sus padres luego de años de independencia, y Estefanía comparte casa con tres personas, lejos de su familia. 

Cada una nos cuenta la experiencia de dividir y compartir gastos con otras personas, las estrategias de organización, además de ahorrar, y darse gustos cuando el presupuesto lo permite. 

A modo de introducción, quiero contarles que el 2023 ha sido un desafío en cuanto a ceñirme a un presupuesto, en la nueva realidad de vivir fuera del hogar familiar, y compartir departamento con amigas. 

Además de los gastos fijos que se sumaron a mi presupuesto, como el arriendo, gastos comunes y obligaciones financieras, ha sido una tarea especialmente compleja controlar los impulsos de comprar todo aquello que me interesa aunque sea un poco. 

Por eso he trabajado mes a mes en crear un presupuesto que me permita vivir tranquilamente, además de disfrutar de pequeños gustos. 

La meta de Üin es lograr que todas las personas, independientemente de su nivel de ingresos, tengan las herramientas necesarias para gestionar de manera consciente sus finanzas. Por eso, queremos partir conociendo la experiencia personal de tres miembros del equipo.

Javiera Catalán, Líder de comunicaciones en Üin

Hasta que las cuentas nos separen 

Con mi pareja vivimos juntos hace dos años, y la verdad es que nunca nos ha costado dividir las cuentas de nuestros gastos fijos (solo los fijos 😅 ). Nos resulta fácil porque siempre se cobran en la misma fecha y generalmente son montos regulares o parecidos. La estrategia que usamos es que el que paga cierto gasto, le cobra al otro, y ya está. A principio de mes quedamos listos y nos olvidamos hasta el próximo cobro.  

Sin embargo, de los “otros gastos” teníamos poco control. Ninguno de nosotros lleva un registro de sus gastos personales hasta el día de hoy. Por eso, solíamos tener muchas pequeñas conversaciones que nos daban lata. Sobre todo cuando esas conversaciones se daban luego de hacer algo que habíamos disfrutado mucho. Por ejemplo, después de comer algo rico o ir a tomarnos alguna cosita. 

Al momento de pagar partían las miradas dudosas: ¿A quién le toca pagar esta vez? – ¿Quién pagó la última? – ¿Cuál de los dos ha gastado más este mes? 🤔. 

Mientras nuestra conversación de miradas sucedía, la persona responsable de cobrar espera, hasta que uno de los dos dice: “Yo pago”. Luego de eso venían esas conversaciones donde echamos mano a la memoria para intentar responder a las preguntas, y saber quién le debía a quién, y  cuánto. El hecho era que queríamos quedar sin deberle nada al otro, sin embargo, la memoria no siempre acompaña, sobre todo después de tomar algo rico 🍹. 

En la actualidad ya no tenemos  estas conversaciones de miradas, porque las respuestas a esas preguntas están en una aplicación que usamos como pareja para tener el control de este tipo de gastos. Se llama Splitwise. En ella registramos todos estos gastos espontáneos, además de las compras en conjunto y lo que pagamos por separado pero son para el hogar o para compartir. 

En nuestro caso, la dinámica es que quien paga, registra el monto en la aplicación y la App calcula cuánto nos debemos. Así, a principios de mes o, en realidad, cuando queramos, arreglamos cuentas. Llevar este registro nos ha ayudado a lograr controlar nuestras finanzas como pareja, y a conocer cuánto estamos gastando en este tipo de decisiones espontáneas. 

Para que no se malentienda, en la relación no todo es deberse y cobrarse. Muchas veces alguno de los dos invita. Y debido a este nuevo control financiero, tenemos más posibilidad de invitarnos el uno al otro. Por eso lo recomiendo un montón 😅. Registren sus gastos para que las cuentas no los separen.  

Espero a futuro, además llevar registro de los gastos que tengo en pareja, poder contarles que tengo mi vida financiera bajo control y que ahorró todo lo que quiero. Por ahora solo les puedo decir que mis gastos al vivir en comunidad están ordenados y son cubiertos sin recurrir a la deuda. Incluso, algunos meses me alcanzan para ahorrar algunos pesitos en Üin. Lo que obtengo de rentabilidad me sirve para invitar a mi pequeña comunidad de dos a alguna salida🍻, lo que me pone muy feliz .

Natalia Bustamante, Líder UX/UI en Üin

Finanzas pet friendly

Hace algún tiempo me vi en la necesidad de regresar a vivir con mis padres, luego de años viviendo fuera. Esto implicó asumir una nueva responsabilidad financiera, no porque ellos me lo pidieran, sino porque siento que es lo correcto. 

Esta nueva responsabilidad es como el pago de un arriendo: colaboro en el pago de las cuentas básicas y del internet, ya que soy la única que trabaja desde casa. A final de mes separo mis ingresos y utilizo parte de ellos para cubrir los gastos de la casa. Ordeno todo ingresando la información a mi banco, desde donde realizo el pago de las cuentas.

 Así transfiero a mi padre una especie de “arriendo” por mi dormitorio, mientras continúo ahorrando para poder adquirir mi vivienda propia. Y antes de hacer cualquier gasto adicional, me aseguro de cubrir todos mis compromisos, ya que considero que esa debe ser mi prioridad. De hecho, para mis padres ha significado un ahorro importante.

Cuando retorné no lo hice sola, me acompañó Leia. Una perrita dorada de 2 años que también tiene gastos que necesito cubrir. Cada dos meses destino una porción de mis ingresos para cubrir su comida. Cada saco de 12 kilos le dura aproximadamente ese tiempo. 

También debo separar un pequeño fondo por si tiene algún accidente y debe ser atendida por un  veterinario. Además, un costo fijo todos los meses son los antiparasitarios, las patitas de pollo y algunas vitaminas.

A ambas nos gusta bastante el aire libre y la aventura, por eso, separamos unas luquitas para conocer lugares juntas, hacer trekking, ir a la playa y comer en lugares petfriendly, para compartirlo en nuestro instagram de viajes. 

Cuando era más joven no pensaba en mi educación financiera. Probablemente, si me hubiera ordenado podría haber comprado mi primer departamento. Si Marty Mcfly me visitara, le pediría prestado su DeLorean y retrocedería al año 2013 y le diría a mi yo del pasado: “Para todo, y mejor junta pa’ la casa”. 

Hace un tiempo comencé a seguir a influencers financieros, he asistido a webinars, y me he inscrito a eventos de inversión inmobiliaria. Ahora invierto en conocimiento financiero.

Catherine Vivanco, Diseñadora en Üin

La nueva independencia financiera

Hace poco menos de un año egresé de la universidad, periodo en el que estuve lejos de mi familia y de mi hogar. Si bien son decisiones difíciles de tomar, pasado cierto tiempo uno se acostumbra a la independencia, al manejo de los tiempos, pero qué difícil es ahí organizarnos para pagar nuestros propios gastos y además ahorrar para nuestros sueños, como el auto, la casita propia, entre otros.

En la actualidad arriendo una casa junto a tres roomies, una de ellas nos subarrienda, por lo tanto, es la encargada de recaudar en la fecha establecida nuestros pagos por concepto de arriendo y gastos comunes. 

La verdad, hasta el momento he logrado ser ordenada y responsable. Por ende, una vez recibido mi ingreso fijo, destino en primer lugar a pagar lo indispensable, mí arriendo y gastos comunes. Luego viene la compra de comida, el pago de cuentas básicas, y otros gustitos. Y sí, también debo pagar esas deudas de tarjetas bancarias que la mayoría tenemos y dejar un conchito para el ahorro. ¡Ay, qué cuesta esto último!

Viviendo en comunidad he aprendido que debemos asumir ciertos desafíos, el ser empático con los demás, el respeto por el espacio del otro, el compartir los espacios comunes y por sobre todo la responsabilidad de asumir un arriendo junto a otras compañeras.

Si estás viviendo una situación similar, o tan sólo necesitas organizarte con tus gastos, tus ganas de ahorrar y todo aquello que necesites para tener una buena salud financiera, te invito a que conozcas Üin, y te aseguro que a través de la planificación lograrás aquello tan difícil como lo es ahorro mensual.

Estefanía Burgos, Analista de operaciones en Üin